Los farmacéuticos colaboran en la campaña “Hay salida”, en contra de la violencia de género
El pasado 25 de noviembre se celebró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La profesión farmacéutica, consciente de que puede tener un papel relevante en detectar posibles casos de violencia de género y sensibilizar a la población, quiso aportar su granito de arena.
En ese sentido, desde finales de octubre participa en la campaña “Hay Salida”, promovida por el Gobierno de España.
Cada año miles de mujeres españolas sufren en silencio la lacra de la violencia de género. El año pasado, 51 de ellas perdieron la vida en manos de su pareja. Para luchar contra la violencia de género el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos se sumó a la campaña institucional “Hay salida”, impulsada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y enmarcada dentro de un Convenio de Colaboración suscrito en 2014.
El acuerdo pretendía impulsar la participación de la profesión farmacéutica y dar herramientas a los profesionales del sector para que pudieran informar y detectar posibles casos de violencia de género desde las oficinas de farmacia, como ya hacen los médicos y enfermeras desde los centros de atención primaria.
Así pues, la Organización Farmacéutica Colegial decidió participar activamente en la campaña del 2015; una campaña iniciada a finales de octubre y que se bautizó con el nombre específico de “Primeros signos del maltrato”.
Las oficinas de farmacia que se adhirieron a la misma, recibieron unos carteles –distribuidos por sus respectivos Colegios Farmacéuticos– en los que se identifican los primeros signos del maltrato y se informa de los recursos disponibles, así como de las diferentes formas de actuar frente al maltrato. El material de la campaña está disponible en castellano y el resto de idiomas oficiales del Estado.
Como bien dijo el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Jesús Aguilar, todas las acciones suman, y apuntó que “la confianza, cercanía y profesionalidad de los farmacéuticos es un valor que ponemos al servicio de la sociedad para tratar de combatir esta lacra”. Queda claro que la accesibilidad del farmacéutico y su cercanía con la gente son unas propiedades que hay que aprovechar para luchar contra la violencia de género.
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